En Jumilla, tras cuatro años de sequía infinita y malnutrición local en cuanto a arreglos y reformas de la ciudad se refiere, de repente y coincidiendo con estos días de elecciones, quien nada ha hecho (excepto si a saraos y fiestas nos referimos), ha entrado en un frenesí de obras que tiene a toda la ciudad patas arriba.
¿Qué pasa aquí se preguntan los incautos ciudadanos que ven las máquinas y obreros por doquier? ¿Acaso a las arcas municipales, tan exiguas y esquilmadas que decían se las habían encontrado le han entrado los dineros de forma milagrosa? ¿Acaso será verdad que tras enjugar la tan cacareada deuda recibida han logrado llenarlas de nuevo? ¿ Por un casual es verdad que España va bien de nuevo y crecemos tan pomposamente como dicen los voceros del Sr. Rajoy?. Seguramente nada de ello es cierto, simplemente quieren que el ciudadano, pique billete depositando el voto a su favor dándoles su confianza y, de paso, un cheque en blanco por otros cuatro años. En estos días de frenesí constructor varios equipos se han dedicado a limpiar las paleras atacadas por la cochinilla en el subidor del Castillo con dos máquinas retro-excavadoras, otro derruía las primeras cuevas del camino y tapiaba la entradas a otras y un tercero repintaba las tablas de los bancos y pasarelas del castillo a su vez que limpiaban la maleza. Por si fuera poco, una empresa foránea instalaba en el recinto un equipo audiovisual que al decir de sus empleados quedara en él de forma permanente. Y todo ello mientras se arreglaba el jardín de San Juan, los del Mercado de abastos y un largo etc. de otras obras menores repartidas por doquier.
Los más escépticos dicen que: ¡Ojala tuviéramos elecciones todos los días! pero dudo que nuestros bolsillos y cuerpos pudieran aguantar este ritmo de forma continuada. Aun ignorando porque misteriosa razón ahora hay dinero para hacerlo y en estos cuatro años no lo hubo (no veo que la economía local haya variado y por tanto los ingresos municipales), bienvenidas sean las obras y reformas.
Pero deberíamos preguntarnos si son estas las más urgentes y prioritarias o, si por el contrario, son las que más se ven y más rédito político pueden dar en las elecciones del 24M. Les pondré un ejemplo: El actual equipo de gobierno ha decidido reformar los parterres de la entrada del mercado instalando una valla metálica en sus contornos de mayor solidez que la existente. Mientras ejecuta esa obra, abandona el arreglo de la techumbre del Pósito que está que se cae y con goteras. ¿No será que el estado de dicho tejado no se ve y los parterres de la plaza se observan mayoritariamente todos los martes? Lo mismo les podría decir de los arreglos en el jardín del barrio de San Juan en frente a algunas aceras y calles en Pueblo Nuevo donde cualquier día se matara un vecino o se lesiona reclamando daños patrimoniales. Para mí no es cuestión de prioridades sino más bien de conveniencia electoralista, pero juzguen ustedes.
«Las pocas cosas que este Equipo de Gobierno ha realizado (léase Jardín de las Ranas y escaleras del Rey D. Pedro), han constituido auténticas chapuzas...»
Ya que vamos de obras y, al margen de que se están haciendo con fines electoralistas, incluidas algunas de las sufragadas con dinero procedente de la Comunidad Autónoma que también juega a lo mismo (afloja ahora la pasta en vísperas de elecciones), espero que al menos se hagan bien y se terminen en condiciones porque las pocas cosas que este Equipo de Gobierno ha realizado (léase Jardín de las Ranas y escaleras del Rey D. Pedro), han constituido auténticas chapuzas bien por su ejecuciómaterialn (caso del jardín de las Ranas con los parterres de ladrillo ya manchados), o el tipo y color de materiales escogidos (caso de las escaleras que se ponen que dan asco).Por si todo ello no fuese para temer a este Equipo de Gobierno, como muestra les daré testimonio de cómo hacen las cosas. Si recuerdan denuncié el pasado 9 de Febrero el estado de abandono y suciedad en que se encontraban los bienes municipales en el artículo "Desidia y olvido de nuestro patrimonio turístico". Apenas unos días más tarde, la puerta del antiguo horno de alfarería fue tapiada; sin embargo, dejaron los restos de basura y escombros en su interior, por dejar dejaron los sacos de papel del cemento y arena utilizados en el tapiado de la puerta. Debieron pensar que, de todas forma,s esos no se veían con el muro tapiado. Tampoco limpiaron las basuras y escombros que siguieron amontonándose en el camino del subidor al castillo o en la calle Acerica frente al citado horno (que aun hoy están tal cual como muestran nuestras imágenes).
Quiero pensar que las basuras arrojadas en las primeras casas del camino al castillo no las habían retirado por que ya tenían prevista la actuación que estos días se lleva a cabo, no obstante les dejo unas fotos de como la basura se había seguido acumulando durante tres meses (del 7 de febrero al 3 de mayo justo el lunes 4 llegaron las máquinas). Ahí tienen la prueba del algodón de cómo actúa este Equipo de Gobierno, ya saben, lo que no se ve no existe ni resta votos, por tanto actúan sobre aquello que de votos directos y no venga a estropear la imagen de su #PasiónporJumilla, de eso, no se ocupan
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Como ciudadano espero que al menos terminen bien las obras y no hagan lo de la "Cagá del lagarto" que hicieron con tapiar la puerta de nuestro último horno moruno dejando infinidad de escombros dentro.