29M: Día del trabajador sindicalista 29 mar 2012 17:23 Legolas

«Esforzados sindicalistas»

Hoy 29 de Marzo, más que el día de la Huelga General debía ser el día del trabajador sindicalista, entre otras razones, porque trabajo no les ha faltado a los delegados sindicales ni a los trabajadores que han formado Piquetes informativos. Cuando todavía no se ha cerrado la jornada de Huelga General, a los líderes sindicales Cándido Méndez y Fernández Toxo, les falto tiempo para indicar que ha sido un rotundo éxito del que el Gobierno deberá tomar nota. Un Toxo crecido amenazaba que de no tomar buena nota se augura una primavera muy sin paz ni tregua social.
La patronal señala que la incidencia ha sido mínima. El ciudadano de la calle, si juzgamos por las encuestas on-line realizadas en diversos programas de radio y televisión, piensa que ha sido un fracaso. Igual piensa el Gobierno quien señala el dato del descenso en el consumo energético (el más bajo de todas las huelgas generales). Añade además que la reforma no cambiará un ápice con independencia de esta huelga. La Ministra del ramo dice que el diálogo está abierto ,pero que la ley es inamovible. ¿Dónde ven estos sindicalistas su éxito?.
Es indudable que sus repercusiones no han pasado de algunos altercados policiales tanto en Murcia como en otros lugares, donde los llamados Piquetes informativos (¡qué eufemismo!), volcaron contenedores, incendiaron neumáticos o taparon cerraduras con silicona. Calles emblemáticas del pequeño comercio en el centro de la ciudad cerraban sus locales al paso de los citados Piquetes informativos, después, tras su marcha, volvían a abrir con normalidad y retiraban las pegatinas. En las grandes superficies la normalidad más absoluta ha reinado a lo largo del día. A pesar de todo ello, estos sindicalistas dicen que ha sido un éxito rotundo.
Cuando deberían estar pensando en el nuevo modelo sindical, en qué hacemos con esos cinco millones de parados que carecen de empleo, ellos siguen con su cantinela de siempre… Veremos por cuanto tiempo pueden sostenerla sin enmendarla, porque la mamandurria de los liberados y subvenciones cada vez se les pone más difícil