En la Comunidad de Madrid, Aguirre dice que no hay menos profesores que otros años. Cierto, sumados los de la enseñanza pública y privada. Pero ocurre que, hasta el curso 2010-11, la pública baja 226 docentes y la privada concertada sube 2.056, en los últimos años.
También dice que el presupuesto apenas ha bajado (¡casi un 10% en 2 años!), pero resulta que el alumnado de la enseñanza pública ha subido un 6’4% y el de la privada un 4’1%. En resumen: en los últimos años, la tendencia ha sido de más alumnos, menos presupuesto y menos profesores en la enseñanza pública, mientras en la privada aumentaban considerablemente los profesores, el dinero que se destina ( al que hay que añadir 80 millones/año de euros en subvención a las familias que escolarizan en la privada) y con un aumento menor del alumnado.
El timo de la Aguirre está servido en Educación, como se está haciendo en Sanidad, como ya ocurrió con la Seguridad Ciudadana en la época de Aznar (en Jumilla aún nos acordamos de sus recortes en medios públicos de seguridad). El timo o estrategia es la siguiente:
- Se “justifican” los recortes porque no se puede “gastar” tanto en Educación o Sanidad. La gente se lo traga porque todos admitimos que debe administrarse bien.
- Se subvenciona el servicio educativo o sanitario de gestión privada. La gente no echa en falta el servicio, aunque sea a costa de menor sueldo y derechos a los trabajadores o bajar la calidad del servicio. En todo caso, sabemos que, en el sector privado, se traga lo que haga falta para no quedarte en la calle, o sin servicio.
- Mientras lo público (Educación o Sanidad) se queja por los recortes, lo privado calla y da “imagen de seriedad”. Terreno abonado para convencer a la gente de que lo privado funciona mejor que lo público, con lo que se debe favorecer lo primero.
- A fuego lento nos van desmantelando lo público, lo de todos, para entregárselo a las empresas privadas. En resumen: menos Estado y más neoliberalismo.
En definitiva, el timo de la Aguirre, y de la mayoría de los dirigentes de la derecha, es sencillo: se recorta el dinero a lo público, se observa que funciona mal (lógico, y todo el mundo lo ve), se subvenciona lo privado, y “cambiazo” consumado. Ya pagaremos las consecuencias de su avaricia.
Y lo triste es que al 99% de la población lo que nos interesa no es el modelo de la Aguirre. Lo que todos deseamos es que se gestione bien los dineros públicos.
Está claro, Jumilla-blog, el que vote al PPSOE que luego no se queje.
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