EL SIGLO DE LAS MUJERES
Año y pico falta para que se cumpla la octava legislatura municipal. Treinta años de democracia en los ayuntamientos, gobernando socialistas o populares, con mayorías o minorías. Siempre, siempre la vara de mando fue empuñada por hombres. Como hombres jumillanos nos fueron los que nos representaron en las Cortes generales, en el Senado o en la Asamblea Regional (con una excepción). Hombres y sólo hombres, los que llegaron a colmar sus grandes aspiraciones políticas.
El PSOE por delante, los demás a la zaga, igual da, por más que pusieron cuotas, los hombres encabezaron siempre nuestra máxima representación. Hoy tenemos 13 hombres frente a ocho mujeres en el consistorio jumillano, pero los portavoces y el alcalde se afeitan cada mañana.
A nuestro alrededor, en el espacio o en el tiempo, las “representantas” más cercanas y relevantes fueron, o son: una presidenta de la Comunidad Autónoma (María Antonia Martínez), una alcaldesa en Yecla (Cristina Soriano), una portavoz de la oposición en el Ayuntamiento de Murcia (Fina Alarcón), la alcaldesa de Cartagena (Pilar Barreiro) la segunda ciudad más grande de la región y, por supuesto, nuestra diputada por el Altiplano.
Nos va pareciendo normal que la presidenta del Tribunal Constitucional sea una mujer, que la vicepresidenta primera del gobierno de España sea otra mujer, que la mitad de los ministros sean mujeres porque así lo cumplió y quiso Zapatero. Y así muchos ejemplos que van siendo lo normal en la vida pública de los españoles.
Llegados a este punto, merece la pena preguntarnos en voz alta si en Jumilla ha llegado la hora de que una jumillana presida la Corporación. No es sitio, ni hay espacio para argumentar lo ganado y merecido que tienen las mujeres jumillanas, el que a alguna de su género le toque el turno. “Haberlas haylas” con méritos suficientes. Incluso, según qué partidos, hasta ya desempeñan cargos de primera línea en sus agrupaciones locales.
No seré yo quien se enzarce con polémicas inútiles sobre las "características de género" que hacen más aconsejable un alcalde o una alcaldesa. Simplemente digo que tenemos una asignatura pendiente y esa es la de dar paso a una alcaldesa para Jumilla. Estoy seguro que reproducirá algunos defectos de los hombres pero también, que daría un giro positivo a la forma de hacer política, naturalmente si los que están a su alrededor han madurado lo suficiente.
3 comentarios :
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Si,si,si Alcaldesa para Jumilla ya.
ResponderEliminartodo llegara, tarde o temprano, segun desde que partido se mire ; como todavia hay hombrecillos que a falta de argumentos solo se les ocurre llamar ( de CUOTA) a las diputadas y ministras pa denigrar su labor ,digo yo que si alguna vez tenemos alcaldesa sera o una alcaldesa como dios manda o DE CUOTA segun del lao ke venga , y ya puestos imaginemos que es lesbiana y se nos casa la Escelentisima ya veremos
ResponderEliminarSi pudiesemos juntar el saber estar de Loli, el empuje y el entusiasmo de Fuensanta, la inteligencia de Seve, la capacidad de trabajo de Yolanda,... tendríamos una alcaldesa inmejorable. Creo que en la actualidad casi todas las políticas jumillanas están como mínimo al mismo nivel que la mayoria de sus compañeros y a muchos de ellos los superan con creces.
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