«Las riadas de Santiago en Jumilla»
Se acercan las fechas de Santiago y Santa Ana, días muy señalados en aquella Jumilla agrícola que hace apenas unas décadas dejamos atrás. Días también, en los que nuestra peculiar climatología local, nos suele obsequiar con alguna tormenta que torrencialmente inunda y barre nuestros campos. Nunca mejor dicho lo de barrer, pues suele ser una tromba de agua que arrasa sus cultivos y sus tierras en forma de riada.
Las riadas han constituido secularmente, junto a las prolongadas sequías, las dos plagas cíclicas a las que nuestros antepasados se han tenido que enfrentar periódicamente, es más, estas solían darse tras un periodo excesivamente largo de ausencia de lluvias. Aún así, era común entre ellos el dicho de: «Es preferible una riada o peñacina a una sequía»
Para conocimiento de nuestros lectores más jóvenes y añoranza de los que ya peinan canas, me propongo en estas fechas recordar dos grandes riadas del pasado siglo. La primera, en el año de 1913 a través de las publicaciones de «El Pueblo» y las coplas de Inocencio Molina; la segunda, mediante mi propia crónica publicada en «El Picacho» en el año 1986. Ambas acaecidas el mismo día de Santiago Apóstol, patrón de España, una a medio día, la otra en la madrugada.
De las dos riadas nos queda, además de lo publicado, el testimonio gráfico de sus estragos. En el caso de la segunda, tenemos además numerosos testimonios de aquellas personas que la vivimos.
Confiamos en que los textos y las imágenes que aparecerán en «El Rendrijero» hasta los días de Santiago y Santa Ana contribuyan a refrescar las memorias y sean de agrado de todos nuestros lectores.
Tal como éramos II
24 jul 2009
08:08
Placido Guardiola
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
0 comentarios :
Publicar un comentario
¡Bienvenido al RENDRIJERO!
¡Gracias por tus comentarios!
Se respetuoso y opina libremente. Tu comentario será revisado y publicado en unas horas.
Ponerse en contacto con el Rendrijero