«A propósito de los blogs y la libertad»
Parece de sentido común pensar que a medida que haya más medios de comunicación, más blogs donde opinar, la libertad de expresión y comunicación será mayor; pero aún siendo esto verdad en principio, la proliferación de medios o soportes de opinión en sí misma no produce una mayor la libertad de opinión. Hoy en todos los países desarrollados hay más medios de comunicación que nunca y la concentración mediática en unos cuantos grupos de comunicación multimedia también es la más grande de nuestra historia. Se produce la paradoja que frente a la fragmentación de los canales de todo tipo, merced a la tecnología digital (TDT televisión, radio digital, redes p2p en Internet, revistas on-line, etc.), los productores de contenidos para estos medios están cada día más concentrados y manejados por menos personas. El sector audivisual del cine y la música está en manos de la Warner, Sony, Fox y Universal ; en la prensa y mundo editorial Rupert Murdoch a nivel internacional, Bertelsmann (Alemania), Hachette (Francia), Berlusconi (Italia) Polanco (España); esto sin hablar de quien decide qué cosas son noticia en el mundo, todas las que conocemos y vemos en prensa radio y televisión sale de tres agencias. Emitir información a través de las ondas pasa, además de conseguir una cuota suficiente de audiencia y publicidad, por el correspondiente permiso o licencia gubernamental y la consiguiente derrama de publicidad institucional en ese medio.
Nos quedan los blogs, ¡Estamos salvados! pensarán Uds. No se engañen, aquí también funcionan los medios que utilices (y no me refiero a los económicos estrictamente, como alguien llegó a pensar dándose por aludido en mi anterior artículo). Me refiero a medios técnicos, capacidad de convocatoria y resortes de divulgación, amén de buenos contenidos que ofrecer a sus fieles seguidores. Yo mismo he realizado un experimento colgando en 2005 un blog con un contador oculto de visitas y una única entrada con el ruego de que el navegante-lector que de con él me deje algún comentario. Trascurridos cuatro años desde entonces, el resultado no es muy alentador: 7 visitas (puede que sean hasta de los robots que rastrean la red), y un comentario que se felicita por dar conmigo en la red. Esto, cuando se supone que la red es un escaparate al mundo.Si me hubiese colocado en la calle del Calvario con un cartel que dijera “Estoy aquí hacerme algún comentario”, por lo pronto habría tenido más visitas en este tiempo y, comentarios, ni se imaginan.
No lo olviden, para que un blog tenga poder de convocatoria debe haber algo detrás, además de que un dominio propio lo facilite. Algo como un programa de televisión caso del Rendrijero (Telecable Jumilla), un partido político (IU, PSOE), un colectivo o asociación (Cuatro patas Jumilla), etc. Eso sin contar que debe albergar unos contenidos que lo hagan atractivo y se ganen la fidelidad de sus lectores. Otra cosa son los diarios íntimos, eso son simplemente íntimos, cuyo destinatario es quien los hace y sus llegados.
Al final, los medios pueden facilitar la cosa de la expresión, pero la libertad de opinión reside en la expresión libre de los ciudadanos. En cuanto al poder de convocatoria, este, se encuentra en otras cosas que iremos desvelando en próximos artículos.
La libertad no la regalan, se gana (II)
12 mar 2009
11:50
Placido Guardiola
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
0 comentarios :
Publicar un comentario
¡Bienvenido al RENDRIJERO!
¡Gracias por tus comentarios!
Se respetuoso y opina libremente. Tu comentario será revisado y publicado en unas horas.
Ponerse en contacto con el Rendrijero